La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica.
- Aristóteles
La inteligencia consiste no sólo en el conocimiento, sino también en la destreza de aplicar los conocimientos en la práctica.
La tonometría es una prueba diagnóstica que mide la presión dentro del ojo, que es llamada presión intraocular PIO. Esta medida ayuda a determinar se existe riesgo de glaucoma.
El glaucoma es una enfermedad que puede llevar a pérdida de la visión si no se trata a tiempo.
En la mayoría de los casos de glaucoma, el fluído que normalmente nutre el ojo se drena lentamente, causando que la presión se eleve.
Sin tratamiento, el incremento de la presión puede dañar el nervio óptico y causar pérdida de visión. De acuerdo a la Academia Americana de Oftalmología, el glaucoma es una de las principales causas de ceguera en adultos mayores de 60 años.
Los cambios causados por glaucoma con frecuencia pueden progresar sin dolor y sin que el paciente los note, por eso la tonometría es crítica para detectar los cambios tempranos.
La tonometría más común es la llamada "tonometría de aplanación de Goldmann". Por décadas ha sido considerada la prueba de referencia (gold standard) para medir la presión intraocular. Implica el uso de una sonda de punta plana que se presiona suavemente contra la superficie del ojo.
También hay otros métodos para medir la PIO. Éstos incluyen una alternativa llamada tonometría de no contacto, así como el Tono-Pen y el tonómetro iCare. Estas pruebas son consideradas menos precisas que la de Goldmann.
En la tonometría de no contacto se aplica presión de aire al ojo usando un instrumento que aplana levemente la córnea. El instrumento sopla una pequeña bocanada de aire en la córnea, midiendo la presión en el ojo.
El Tono-Pen es una aparato manual con forma de marcador. El médico pega el aparato al ojo para medir la PIO.
El tonómetro iCare también es una aparato manual toca suavemente el ojo para obtener una medida de la PIO.
Referencia
La detección temprana, a través de los exámenes visuales completos y regulares, es la clave para proteger la visión del daño causado por glaucoma.
Un examen visual completo incluye cinco pruebas comunes para detectar glaucoma y es importante tener un examen regularmente a partir de los 40 años.
Los signos tempranos de enfermedad ocular y los cambios en la visión pueden empezar a ocurrir a esta edad. El médico indicará la frencuencia con que es necesario realizarse los exámenes, dependiendo de los resultados de la prueba inicial.
Si la persona tiene factores de alto riesgo para glaucoma, como diabetes, presión arterial alta, o una historia familiar de glaucoma, debe acudir a revisión oftalmológica.
Los exámenes deben incluir:
El rango para una presión normal va de 12 a 22 mmHg (milímetros de mercurio), una escala usada para registrar la presión del ojo.
La mayoría de los casos de glaucoma son diagnosticados con presiones que exceden los 20 mmHg. Sim embargo, algunas personas pueden tener glaucoma con presiones de entre 12 y 22 mmHg. La presión intraocular normal es única en cada persona.
El médico usa un aparato con luz que magnifica la imagen del nervio óptico. Si la presión intraocular no está dentro del rango normal o si el aspecto del nervio óptico no parece normal, el médico puede pedir uno o dos exámenes adicionales: perimetría y gonioscopía.
Durante el examen se le pide a la persona que vea directo hacia enfrente mientras una luz se presenta repetidamente en diferentes áreas de la visión periférica. Esto ayuda a dibujar un mapa de la visión.
Después del diagnóstico de glaucoma, los exámenes del campo visual se hacen uno o dos veces al año para ver si hay cambios en la visión.
Durante el examen, se ponen gotas para anestesiar el ojo y se usa un lente que se mueve por la superficie del ojo para analizar si el ángulo entre el iris y la córnea está bloqueado o es amplio.
Con esta medida, el médico puede entender mejor las lectura de la presión intraocular y desarrollar el plan de tratamiento correcto para cada persona.
El diagnóstico de glaucoma no siempre es fácil y por eso una evaluación cuidadosa del nervio óptico es esencial para el diagnóstico y tratamiento.
El objetivo más importante es proteger la visión por lo cual el médico evaluará muchos factores antes de tomar decisiones acerca del tratamiento.
Si la condición de una persona es particulamente difícil de diagnosticar o tratar, puede referirse a un especialista en glaucoma.
Siempre es bueno pedir una segunda opinión si el paciente o el médico tienen dudas acerca del diagnóstico o el progreso.
Referencia
Escrito por Selina Powell para Optometry Today.
Autores de BMJ Case Reports alientan a los pacientes de cirugía láser a pegar con cinta las mascarillas al puente nasal durante el período de recuperación.
Su recomendación tiene que ver con el caso de un paciente de 26 años que dislocó su colgajo LASIK en un ojo 4 horas después de la cirugía mientras se acomodaba su mascarilla N95.
La revisión en la lámpara de hendidura reveló un desplazamiento del colgajo, con varios pliegues.
Después de que el colgajo fué acomodado, se le colocó un lente de contacto de vendaje sobre la córnea y recibió antibióticos tópicos, esteroides y lubricantes.
El lente de contacto de vendaje fue removido después de dos semanas, y para entonces su visión en el ojo afectado fue de 20/20.
"Al paciente se le recomendó pegar con cinta la mascarilla al puente nasal para evitar que se repita el accidente," destacaron los clínicos.
El paciente dijo sentirse aliviado de recuperar la visión después de que se le acomodó el colgajo.
Referencia
Factores de riesgo.
También los latinos enfrentan un riesgo mayor y progresa más rápido a medida que envejecen.
Un estudio presentado en la reunión de la Academia Americana de Oftalmología en 2021 presentó evidencia de que la baja presión arterial podría estar asociada con un mayor riesgo de GPAA.
Aunque no pueden controlarse todos los factores de riesgo de glaucoma, conocerlos puede garantizar que la vista esté mejor protegida y se evite la ceguera.
No se puede subestimar el valor de los exámenes oculares regulares y completos.
A medida que avanzan los estudios, se encuentran más tratamientos. El glaucoma puede ser tratado con gotas, con láser y técnicas menos invasivas.
Las técnicas de diagnóstico en cualquier etapa, así como su seguimiento, también avanzan para permitir que la visión se preserve mejor.
Artículo revisado por el Dr Mark Werner, oftalmólogo especialista en glaucoma en Delray Beach, Florida.
Referencia