El proceso normal de envejecimiento afecta el rendimiento del sistema visual de muchas formas. Por ejemplo, la función de sensibilidad al contraste (SC) disminuye a lo largo de la vida.
Este deterioro de la visión espacial se produce por varias razones, que van desde la degradación puramente óptica hasta pérdidas retinianas y neurales.
La contribución relativa de los factores ópticos a este deterioro no está completamente establecida, aunque ahora se acepta que los factores ópticos desempeñan un papel importante en los ojos normales.
En el ojo que envejece, hay una mayor absorción de luz por los medios oculares con una contribución espectral diferente, un diámetro pupilar más pequeño (miosis senil), un incremento de la dispersión intraocular y una reducción casi completa de la capacidad de acomodación.
Referencia
- Age related changes in the human eye, Carlo Cavallotti, Luciano Cerulli, Humana Press, 2008.