Perimetría (examen del campo visual).
La perimetría produce un mapa del campo visual. Este examen ayudará al médico a determinar si la visión ha sido afectada por el glaucoma.
Durante el examen, el paciente mira hacia enfrente y presiona un botón cuando detecta un punto luminoso en la visión periférica. Los puntos luminosos variarán en intesidad de tal manera que algunos serán fáciles de ver mientras otros no los verá aunque tenga una visión normal.
El resultado del examen puede variar si la persona está cansada o nerviosa.
El médico puede repetir el examen para ver si los resultados son iguales.
Después de que el glaucoma ha sido diagnosticado, el examen del campo visual se hace una o dos veces al año para ver si ha habido cambios en el mapa.
Gonioscopía (examen del ángulo de drenaje del ojo).
La gonioscopía es un examen diagnóstico que ayuda a determinar si el ángulo entre el iris y la córnea está abierto o cerrrado.
Durante el examen se usan gotas de anestesia y se usa un lente con espejos que permite al médico revisar el ángulo iridocorneal para determinar su estatus.
Paquimetría (medida del grosor corneal).
La paquimetría es un examen que mide el grosor de la córnea. Una córnea delgada es un factor de riesgo para glaucoma.
El grosor corneal también tiene el potencial de influir en las lecturas de la PIO. Si una córnea es más gruesa que el promedio, la lectura puede resultar más alta que la PIO real y si la córnea es más delgada las lecturas de la PIO pueden aparecer más bajas de lo que en realidad son.
Usando la paquimetría el médico puede entender mejor las lecturas de la PIO y desarrollar un plan de tratamiento.
Referencia